Betis 1 - 1 Deportivo

UN PUNTO QUE ATASCA POR ARRIBA Y POR ABAJO

El Betis también falló en esta jornada. Como lo hicieron Rayo Vallecano, Getafe,Sevilla y Espanyol y la distancia del equipo de Pepe Mel se mantiene con sus rivales por los puestos europeos. El conjunto verdiblanco apostó descaradamente por Europa cuando la salvación ya era virtual. Y desde entonces, no se ha descolgado de la zona alta. Pero la irregularidad domina en los conjuntos que pelean por la Europa League. El Betis empató con un Deportivo que gasta su última vida tras la resurrección milagrosa que ha obrado Fernando Vázquez. Y lo hizo en casa, en el Villamarín, de donde no pueden escaparse más puntos, que resultarán definitivos y claves para alcanzar el objetivo de viajar por Europa durante la próxima temporada.

De inicio, Fernando Vázquez ganó la partida a Pepe Mel. El técnico del Deportivo pobló su mediocampo y ahogó toda posibilidad de creación del Betis en esa zona. Cañas y Beñat se encontraban demasiado separados de los extremos y los dos delanteros. A esa superioridad inicial también contribuyó una genialidad de Riki. El Deportivo se adelantó en el minuto 6 con un golazo de su delantero, que se aprovechó de un saque de esquina rival para conducir la pelota a la contra mientras amagaba contrarios. Dejó sentado a Nacho y, algo escorado, lazó un derechazo cruzado desde dentro del área, imposible para Adrián. El tanto del Deportivo noqueó a los futbolistas béticos que apenas podían superar el planteamiento del rival. Y el Deportivo pudo ampliar la distancia pero Adrián, con dos grandes intervenciones, despejó un disparo raso de Riki y un cabezazo a bocajarro de Aythami desde dentro del área. El Deportivo controlaba el partido con sus armas. Fernando Vázquez no llegó como un entrenador, sino como un médico de urgencia, un psicólogo o un ilusionista. Dibujó en la mentalidad de un equipo hundido una salvación utópica que se ha transformado en realidad.

El Betis comenzó con un planteamiento más vertical con Vadillo y Campbell en los costados. Y mejoró cuando ambos extremos cambiaron a su banda más natural. El extremo canterano amagó a su marcador, llegó hasta la línea de fondo y centró a Campbell que, de primeras y con el interior, disparó fuera, en la ocasión más clara para los locales. Al Betis le costó media hora de juego cambiar la dinámica y adaptarse a las nuevas circunstancias que el marcador requería. Observó que la zona central de la defensa rival era la parte más débil del conjunto coruñés. Y por ahí creó peligro, por donde Jorge Molina y Rubén Castro realizaron excelentes movimientos.

Jorge Molina empató tras la reanudación

 Jorge Molina pudo empatar tras un error de Kaká, pero su remate, algo forzado, lo despejó Aranzubia a córner. El delantero bético disputó, una vez más, un partido plagado de detalles que lo definen: trabaja como nadie, participa, la pide, tiene ocasiones, falla las más claras y, cuando ya nadie apuesta porque anotará, Jorge Molina se fabrica él solo un gol de categoría. Aunque en el tanto del empate, ya en los primeros minutos de la segunda mitad, también contribuyó el central Kaká. El delantero bético no destaca por su velocidad con el balón pegado al pie, pero con Kaká como rival, se convirtió en Romariopara superar al defensor del Deportivo, que aún no se había dado la vuelta cuandoMolina batió a Aranzubia.

El Betis fue entonces más directo, con Pabón ya como recurso ofensivo en lugar de Vadillo. El delantero colombiano aportó su movilidad, su fuerza y su descaro a la hora de buscar portería. El conjunto de Pepe Mel fue más agresivo y agobió al rival, a quien el encuentro se le hizo largo desde la reanudación. El Betis lo intentó con mucha persistencia, especialmente con disparos de media distancia, pero que no encontraron portería. Al Deportivo el punto le parecía suficiente y en los últimos minutos intentó ralentizar el ritmo con posesiones más largas. Los futbolistas de Pepe Mel intentaban lo contrario, que el encuentro se partiera para explotar la velocidad de sus futbolistas. El partido fue tan noble que hasta Valerón, sustituido por falta de fuerzas al final, fue ovacionado por la grada del Villamarín, porque el talento es de todos y no tiene dueño.

El Betis no supo aprovechar la oportunidad de los malos resultados de sus rivales durante esta jornada. El empate crea atasco tanto en la zona de Europa League como en lospuestos de descenso. Por arriba, ningún conjunto pudo beneficiarse de los resultados de sus rivales, y por abajo, nadie quiere quedarse descolgado, en una jornada en la que sólo el Mallorca no puntuó. 

Joaquín Rueda Fernández @joaquimedia

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