Justa derrota en la Rosaleda pese a los errores
arbitrales
Málaga 4 - 0 Betis
Primera derrota del Betis como visitante esta temporada, dejando una pésima imagen en La Rosaleda pese a que los errores arbitrales volvieron a condicionarle. No obstante, la falta de tensión, la candidez y la fragilidad defensiva no son justificables por la expulsión de Casto en el minuto 10, que dejaría lastrado a los de Mel, pero que en ningún momento mostraron la intensidad y agresividad necesaria ante un Málaga que ganó a medio gas sin apenas recibir una falta.
Los primeros minutos no anticiparon lo que vendría después. El Betis salió con el ímpetu necesario para tratar de hacerse con el mando del encuentro, aunque sin inquietar en ningún momento la meta de Caballero.
Pero tras diez minutos de tanteo, el encuentro se decantó de forma casi definitiva en una rápida contra local que acabó con Eliseu ante Casto y derribo del portero al interior luso. Penalti claro, pero no así la expulsión decretada por Estrada Fernández, discutible cuanto menos. Lo cierto es que Adrián ocupaba el puesto de Agra y sólo podía recoger el balón del fondo de la red tras transformar Joaquín la pena máxima.
El Betis, desaparecido
Obviamente, la inferioridad numérica era un losa importante para los verdiblancos, aunque no era motivo suficiente para ofrecer una imagen tan lastimosa. Sin ninguna presencia en ataque, el resto de la primera parte fue un monólogo del Málaga, que se apresuró a cobrar más ventaja pensando en el encuentro de Liga de Campeones del miércoles. Pudo marcar Camacho al rematar al palo, pero sería Saviola el que aprovecharía una pared con Portillo (en fuera de juego) para hacer el segundo. A partir de ese momento, los locales levantaron el pie del acelerador mientras que Mel dio entrada a Nono por Rubén Pérez, aunque se llegó al descanso sin mayor novedad.
Tras la reanudación, la inercia del encuentro fue similar. Rubén Castro sustituyó a Jorge Molina pero la primera ocasión clara sería para Eliseu y luego para Saviola en el rebote, aunque Adrián, con valentía, atajó el peligro. En el 54 sería Demichelis el que pudo hacer el tercero y aunque el colegiado perjudicó al Betis en el primer tiempo, lo cierto es que dejó sin señalar una mano en el área de Nacho y decretó un fuera de juego inexistente que, no obstante, Adrián resolvió con presteza.
Obviamente, la inferioridad numérica era un losa importante para los verdiblancos, aunque no era motivo suficiente para ofrecer una imagen tan lastimosa. Sin ninguna presencia en ataque, el resto de la primera parte fue un monólogo del Málaga, que se apresuró a cobrar más ventaja pensando en el encuentro de Liga de Campeones del miércoles. Pudo marcar Camacho al rematar al palo, pero sería Saviola el que aprovecharía una pared con Portillo (en fuera de juego) para hacer el segundo. A partir de ese momento, los locales levantaron el pie del acelerador mientras que Mel dio entrada a Nono por Rubén Pérez, aunque se llegó al descanso sin mayor novedad.
Tras la reanudación, la inercia del encuentro fue similar. Rubén Castro sustituyó a Jorge Molina pero la primera ocasión clara sería para Eliseu y luego para Saviola en el rebote, aunque Adrián, con valentía, atajó el peligro. En el 54 sería Demichelis el que pudo hacer el tercero y aunque el colegiado perjudicó al Betis en el primer tiempo, lo cierto es que dejó sin señalar una mano en el área de Nacho y decretó un fuera de juego inexistente que, no obstante, Adrián resolvió con presteza.
El encuentro pudo cambiar en el minuto 61 si Rubén Castro hubiese aprovechado un fenomenal pase de Beñat que le dejó en franquicia ante Caballero. Sin embargo, el canario estuvo algo lento y Welington tuvo el tiempo necesario para desviar a córner el remate del delantero verdiblanco. Dos después, Molina progresó por la banda izquierda y dio un buen pase al corazón del área, aunque la zaga malacitana desactivó el peligro con Rubén Castro esperando para rematar. La entrada del canario le dio más alegría en ataque al Betis aunque iba a ser el Málaga el que anotara el tercer tanto.
La enésima entrada local por el flanco derecho defendido por Nelson acabaría en un centro de Monreal que aunque le llegaba franco a Santa Cruz, sería Amaya el que en propia puerta colocaría el 3-0. Corría el minuto 72. Uno después, un grosero fallo de Cañas en la salida del balón dejaba a Isco en ventaja para batir a Adrián en su salida. Justo castigo para el Betis, no así para Adrián, el mejor de los verdiblancos, que salvó el quinto en dos mano a mano con Sebas Fernández en los minutos 75 y 89.
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