Enhorabuena

ENHORABUENA A TODOS LOS CORAZONES VERDIBLANCOS.
YA SOMOS DE PRIMERA.
VOLVIMOS!!!!!!!!!


Grítalo. Fuerte, que no te avergüence. Siéntelo. Víbralo. Como el primer partido, como aquel 4-1 contra el Granada allá por el lejano mes de Agosto. Porque te pasó como a todos, que aquella noche sentiste que este año iba a ser diferente. Miki Roqué. Lo notaste, yo también. Ese día, algo en tu interior comenzó a crecer y a creer que sí, que este año sí, que no podía ser que tanta injusticia se acumulara siempre hacia el mismo lado, el verde y blanco. Pasaban los días y las semanas como pasan las jornadas, porque lo futboleros no contamos por meses, lo hacemos por jornadas, y esa intuición se iba tornando en algo concreto, algo evidente. Este año sí. Porque esta temporada, tú, desde el principio, sabías que algo iba a cambiar. Miki Roqué. Sabías que esta temporada se iba a lograr y que no iba a ser solo por ser quienes somos (que no es poco, sino mucho), sino porque parte de la basura se había conseguido sacar a tiempo. Basura que impedía, tanto en lo institucional como en lo deportivo, que esta entidad deportiva tan grande estuviera en el lugar que se merece, que no es más que la primera división. Lacra, mierda y un árbol que en su momento nos impidió ver el bosque en su totalidad. Miki Roqué.


La justicia, lenta en nuestro estado de derecho pero en este caso eficaz, taló ese árbol y continúa trabajando para que las pocas raíces que quedaron con vida puedan sobrevivir y volver a sembrar malas hierbas que consigan prosperar para regresar y volver a instaurar ese estado de terror. Se consiguió. El Betis, LIBRE. Miki Roqué. A partir de ahí, que sea la pelota, el balón, la ‘redonda’, la que mande. Ante esta nueva situación, en torno a esta nueva libertad aparente (recordemos que mientras ese árbol se taló, las malas hierbas aprovecharon esa situación para lucrarse a costa del REAL BETIS BALOMPIÉ) se creó un EQUIPO DE FÚTBOL con un bético al frente: Pepe Mel, el gran faro, el gran artífice de lo que hoy celebramos. Un conjunto humano y deportivo increíble, que nunca dejó de luchar, incluso en situaciones insostenibles, cuando peligraba el pan de los suyos. Un equipo directivo que incluso en casos concretos, luchó hasta su último aliento por un BETIS LIBRE. Miki Roqué. El embarazo que pregonó el otrora salvador del Betis (que ya existía antes de él), duró un año más de lo que hubiéramos deseado. Pero sin duda, este año de más, en la presente y futura historia del REAL BETIS BALOMPIÉ, nunca será de menos. Miki Roqué. Lo que no te mata, te hace más fuerte, y a partir de ahora, nadie podrá con nosotros. Siendo el fútbol la cosa más importante de las cosas que no tienen importancia, me alegro de poder escribir estas palabras, cómo no, y siempre, en verde y blanco.

MUSHO BETIS

Texto: Joaquín Rueda

Fotografía: Marta Linares